La cosmética ecológica es una gran aliada contra los efectos de la contaminación urbana

La cosmética ecológica es una gran aliada contra los efectos de la contaminación urbana

¿Sabías que vivir en la ciudad acelera el envejecimiento de tu piel?

De todos es bien sabido que los rayos del sol son una causa directa del envejecimiento y nos veníamos protegiendo de sus efectos nocivos con productos cosméticos como cremas y maquillajes. Pero no es el único factor ambiental que daña y envejece las células cutáneas. Estudios recientes han confirmado que hay otros agentes externos que interviene cada vez más en la aparición de arrugas y manchas, entre ellos la contaminación del aire.

La exposición diaria a la polución de las grandes ciudades puede alterar las células cutáneas, ensuciar la piel, restar luminosidad, deshidratarla, volverla irritable, hacer que pierda su flexibilidad y luminosidad, desarrollar problemas como el acné o la dermatitis, entre otros muchos cambios, que acaban alterando la juventud y el bienestar de nuestra piel.

En la actualidad, más del 90% de la población está sometida a niveles más altos de los límites marcados por la Organización Mundial de la Salud, mientras la tendencia para los próximos años es que sigan creciendo las grandes urbes.

Los peores contaminantes para la piel

Existen diferentes agentes contaminantes responsables de las agresiones a la piel, como pueden ser:

  • Los hidrocarburos
  • El humo del tabaco
  • El ozono
  • Los óxidos de nitrógeno
  • Los metales pesados
  • Las partículas en suspensión

No debemos pasar por alto la contaminación doméstica, a causa de productos como pinturas, productos de limpieza del hogar, calefacción y aires acondicionados.

Con todo, un aire de mala calidad genera radicales libres en exceso llegando a colapsar las defensas naturales de nuestro organismo. Los antioxidantes de nuestro cuerpo se ven desbordados produciéndose lo que se conoce como el estrés oxidativo, que degrada las células de la piel y es la causa principal del envejecimiento cutáneo.

¿Cómo afecta la contaminación a tu piel?

La piel es la principal barrera de nuestro cuerpo frente a los agentes externos, de manera que  se altera rápidamente ante la contaminación atmosférica de las ciudades. Los principales signos de una piel afectada por el estrés oxidativo son muchos:

  • Deshidratación
  • Oxidación celular
  • Manchas
  • Arrugas
  • Eccemas e hipersensibilidad

Cómo frenar los efectos de la polución

La cosmética natural es una gran aliada contra la contaminación urbana ya que sus formulaciones están libres de tóxicos y, por otro lado, ayudan a la conservación del medio ambiente. En nuestro caso, para su elaboración recurrimos a fuentes de energía renovables, con un menor consumo de agua y de residuos, lo que ayuda a evitar la emisión de gases a la atmósfera.

En Natural Cosmetic Lab somos conscientes de la necesidad de desarrollar formulaciones específicas para combatir los efectos de la contaminación en la piel. Productos antipolución a base de principios activos naturales como el compuesto por  extractos de Citrus limonum, Hordeum vulgare, Panax ginseng, Prunus pérsica, Pyrus malus, Triticum vulgare, con los que podemos fabricar toda una línea cosmética especialmente diseñada para contrarrestar los efectos de la contaminación:

  • Bloqueo químico de los metales pesados.
  • Protección y estabilización de las membranas celulares para evitar la acción de los metales pesados.
  • Acción antioxidante frente a la generación de radicales libres.
  • Eliminación de los agentes contaminantes de la piel.

Para plantarle cara a la polución y al estrés ambiental  también es importante adoptar todos los días una rutina de limpieza y cuidados que contrarreste los efectos diarios de la contaminación y que básicamente pasa por limpiar, purificar, hidratar y proteger la piel. Es aconsejable:

– Limpiar profundamente la piel. El primer paso es eliminar las impurezas acumuladas a lo largo del día, usando un  limpiador como pueda ser un agua micelar por la mañana y por la noche y un exfoliante una vez por semana.

– Los antioxidantes –  son nuestra principal arma para combatir los radicales libres. Para ello es importante seguir una dieta a base de muchas frutas, verduras y legumbres ricas en vitamina C y completar con un tratamiento facial antioxidante.

– Proteger de la radiación solar. Cuidar nuestra piel de los rayos solares es una buena rutina que no deberías dejar solo para el verano, con filtros de amplio espectro frente a los rayos UVB y UVA.

Una rutina simple pero regular, con productos específicos y naturales, puede ayudar a purificar la piel de cualquier acumulación de polución.