Años de investigación y especialización nos permiten hoy crear innovadores cosméticos naturales eficaces y respetuosos con el medio ambiente

La industria cosmética es un sector altamente innovador, donde el ciclo medio de vida de un producto es aproximadamente de cinco años, y necesita estar siempre en constante evolución. Es la innovación la que facilita a las empresas penetrar en nuevos mercados, ofrecer novedosos productos y evolucionar atendiendo los retos que plantea el futuro del sector y las demandas del consumidor.

Son precisamente las nuevas generaciones y su forma de consumir las que están suponiendo un cambio sin precedentes en la industria cosmética. La creciente preocupación por el medioambiente y las medidas que se están tomando desde todos los ámbitos y sectores por preservar nuestro planeta conllevan un cambio de hábitos en el que se incluye el mundo de la belleza.

El concepto de belleza y cuidados personales ha cambiado, se ha vuelto más integral y va más allá de los beneficios del producto en sí. Los consumidores buscan cosméticos que compartan sus mismos valores en términos de salud, ética y medio ambiente y demandan productos que giren en torno a la sostenibilidad. Un consumidor cada vez más consciente con la huella de sus acciones diarias y que está exigiendo un cambio en la manera de hacer las cosas. En este sentido, hoy más que nunca nuestro sector necesita de los avances científicos. Investigaciones que aporte mejoras en cuanto a la seguridad y eficacia de los cosméticos, pero siempre desde el respeto a la naturaleza, permitiéndonos el desarrollo de innovadores productos orgánicos, ecológicos y más sostenibles.

Como laboratorio especializado en la fabricación para terceros de cosmética natural, ecológica y vegana, tenemos una cultura innovadora desde nuestros orígenes. Una trayectoria en la que hemos tenido que saber mantener el equilibrio entre un alto grado de innovación en formulaciones y servicios para ofrecer productos naturales y eficaces, a la vez que introducir nuevas metodologías de trabajo y tecnología respetuosa con el medio ambiente.

Con todo, cada uno de nuestros productos es fruto de una innovación constante en materias primas, procesos y mejora de resultados, que no solo resuelven las necesidades de cuidado personal, sino también las medioambientales y sociales. Productos con los que cubrir de forma eficaz las diferentes necesidades en el cuidado facial, corporal, capilar y bucal, además de apostar por la búsqueda de formatos prácticos en su aplicación que faciliten las rutinas diarias
de bienestar, de unas generaciones con apretadas agendas pero que no renuncian a su espacio de cuidados y belleza naturales y que utilizan una media de 7 productos diarios.

Estos años de investigación y especialización nos permiten hoy poder elaborar una nueva generación de cosméticos dirigidos a seguir ganando en innovación y sostenibilidad, con nuevos formatos cómo los sólidos y renovados procesos de producción con los que se reduce notablemente la huella ambiental en un sector que históricamente ha tenido un enorme impacto sobre el planeta. Tecnología, formulaciones, procesos productivos, envases y envío final a los clientes, todo dirigido a reducir la huella de impacto ambiental de en cuanto al consumo de recursos (agua, energía, materias auxiliares) o la generación de residuos (aguas residuales, envases…). En definitiva, investigación y desarrollo dirigidos a ganar en sostenibilidad y responsabilidad como los grandes retos de la cosmética del futuro.