Estamos asistiendo a un cambio en los hábitos de consumo a favor de lo que llamamos productos naturales. Nos hemos vuelto más exigentes y queremos que los cosméticos que usamos para el cuidado e higiene de nuestra piel y cabello estén libres de tóxicos. En el último año, la cosmética natural creció un 6% por encima de la convencional.